Guatemala, como los demás países del norte de Centroamérica, se enfrentan a altos índices de violencia, criminalidad, corrupción, desastres ambientales y pobreza, lo que genera flujos continuos de personas que deciden emigrar hacia a Estados Unidos.
Para la juventud, la migración es una forma de replantearse proyectos de vida, a partir de expectativas generadas por la falta de acceso a mejores condiciones estructurales a nivel nacional y local. Esta decisión tiene un impacto directo en la familia y la comunidad a nivel emocional y económico.
Las políticas migratorias del país están basadas, hoy en día, en normas y acuerdos de control migratorio con una orientación de seguridad impuesta desde los Estados Unidos. Esto lleva a un endurecimiento de las medidas de contención, detención y deportación. Imponiendo un carácter restrictivo y policial, en contra de los derechos humanos.
Desde 2020 a 2022, un total de 94.633 migrantes guatemaltecos fueron expulsados de Estados Unidos por intentar entrar en el país a través de la frontera desde México (Instituto Guatemalteco de Migración 12.2022).
50 AÑOS DE EMIGRACIÓN
En las comunidades de Chimaltenango y Huehuetenango, la migración ha sido una forma de subsistir y contribuir al sostén de las familias, desde la década de 1960. El acceso a fuentes de trabajo diferentes a la agricultura de subsistencia ha sido un impulso para muchas personas que ven limitadas sus oportunidades ante el poco desarrollo económico de estos sectores tradicionalmente excluidos en Guatemala.
En Chimaltenango, el municipio de San Martín Jilotepeque es uno de los municipios expulsores de migrantes hacia EEUU. La suma de desempleo, falta de oportunidades laborales y/o educativas, pobreza y reunificación familiar, entre otros, siguen siendo las principales causas de la migración. Esta situación les ha dado poder a prestamistas y a los, popularmente, conocidos como “coyotes”. Con información falsa, estos delincuentes animan a las personas a pensar que será un viaje seguro o que no serán detenidos. Un negocio rentable para quienes se aprovechan de la vulnerabilidad en que las personas de esta región viven.
Huehuetenango es un área fronteriza cercana a México. La zona se encuentra dominada por la presencia del narcotráfico; trata y tráfico ilegal de personas y violencia de género. La policía nacional civil participa en actividades violatorias de derechos humanos con la población migrante como extorsiones o abuso sexual a mujeres jóvenes, entre otros.
FORTALECER REDES LOCALES PARA EL EJERCICIO DE LOS DERECHOS
Cuando toman la decisión de migrar, las y los migrantes, desconocen, en su mayoría, los riesgos que esta conlleva. Emprenden su viaje inadvertidos sobre las dificultades del terreno por el que transitarán, el hambre, la sed y la violencia a las que se enfrentarán en el camino. En muchos casos, son abandonados o entregados a otros grupos delictivos, donde quedan expuestos a secuestros, abusos sexuales o trata.
Como parte del proyecto en conjunto con ECAP (Equipo de Estudios Comunitarios y Acción Psicosocial), se capacitarán y fortalecerán en los departamentos de Chimaltenango y Huehuetenango grupos y comités locales, donde participan mujeres adultas afectadas por la migración y jóvenes en riesgo de migración. Las temáticas de capacitación abarcan DDHH, migración y género.
Se espera que sus participantes se vuelvan voceros de la defensa de los derechos de las personas migrantes, brinden información sobre rutas de atención y resolución de problemas migratorios, fomenten la denuncia de violaciones a los derechos humanos y participen en la formulación de políticas públicas migratorias, incluyendo el Código Migratorio y la búsqueda de migrantes desaparecidos.
INICIATIVAS ECONÓMICAS PARA EL PROGRESO
Como parte del proyecto, ECAP, acompañará a los beneficiarios con diferentes iniciativas económicas para fomentar el arraigo e influir en una mejor administración de las remesas recibidas.
La población de la región donde se ejecuta el proyecto cuenta por herencia cultural con conocimientos de artesanía, gastronomía y agricultura. En el caso de los comités, se pone énfasis en la comercialización de los productos producidos. Los grupos de mujeres están enfocados a la mejora de sus productos artesanales y actividades de seguridad alimentaria. En el caso de los jóvenes se impulsan alternativas económicas y/o socioculturales para el arraigo comunitario.
DESPLAZAMIENTO INTERNO EN GUATEMALA
En el marco de este proyecto, y en vista de la situación migratoria en Guatemala, ECAP, planteará la problemática del desplazamiento forzado interno en la agenda pública nacional y colocará el tema en el Bloque Latinoamericano sobre Migración como prioritario.
Al finalizar el proyecto se espera haber posicionado la temática en los medios de comunicación para lograr una difusión masiva.
Información del proyecto
Proyecto | Fortalecimiento del trabajo comunitario con perspectiva de Derechos Humanos y género en contextos de migración y desplazamiento forzado en Chimaltenango y Huehuetenango |
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Lugar/Región | Guatemala Departamento Huehuetenango: Municipio Nentón y comunidades Chacula y El Aguacate. Departamento Chimaltenango: Comunidades de San Martín Jilotepeque, El Molino, Xesuj Los Pinos |
Socio | Equipo de Estudios Comunitarios y Acción Psicosocial (ECAP) |
Grupo objetivo | 980 Personas |
Actividades |
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Duración | 2022-2024 |
Presupuesto | 240.000€ |
Patrocinador | BMZ (Ministerio Federal de Cooperación Económica y Desarrollo, Alemania) |